viernes, 15 de agosto de 2008

POR NOsotros

Hombre que diga que nunca ha visto pornografía es un mentiroso.
Mujer que diga que nunca en su vida ha visto porno, la entiendo, pero estoy seguro que se muere de ganas por hacerlo.

Como hombre me declaro ex amante del porno. Todo comenzó en la secundaria, creo yo. Ahí en el cole, creo, nunca pertenecí a un grupo. Quiero decir que no era de los pavos ni de los que se creían avivados por alguna razón anormal y universal. Simplemente era el típico estudiante normal pero siempre con el infaltable look del pavo... pavaso diría yo. Raya al costado; chompa con sierre; pantalón completito ( nunca estaba roto pr ningún lado); siempre con polo debajo de la camisa, y esta a su vez metida en el pantalón; zapatos bien lustrados, nunca zapatillas (a excepción de educación física). Pavo en acciones... muchas veces lo demostré: Pocas veces jugué fútbol en el recreo, pues me quedaba conversando o jugando ajedrez (increíble aunque no lo crean), siempre pertenecí a los policias escolares, Caceristas, brigada, marcha o cualquier otra weada que a los directores se les ocurrían para que todo alumno siempre tenga su hora de relajo y sobretodo sin estudiar.

No diré que fue la primera vez que lo vi, pues el amorío ya había comenzado años atrás, pero era un amor de curiosidad, que muy eventualmente me hacía trasnochar para vivirlo.
El hecho de ser de la introducción es porque en esos tiempos se desató la locura. Era el tema de entorno diario del cole, nos dirán enfermos, malogrados, asquerosos; nosotros siempre a MUCHA HONRA. El internet era escaso y muy caro en esos tiempos, así que había que conformarse con la televisión. En mi casa recién llegaba el medio paquete de cable (siempre pirateado, pues nuestro abastecedor era el vecino de al lado.

En el cole, por su parte, tenía tv guides porno vivientes en vez de amigos, pues tenían una programación pornera desde las 11 pm. hasta las 2 o 3 am. Yo, en muchos casos, prefiría dormir. Noches de clímax, las aventuras del gato, cueros, los cuerazos del 33 y algunas pellículas más que se mostraban en televisión basura, es decir la nacional (entre los más visto). Señal cerrada o abierta, no había excusa para no ver las películas explícitamente prohíbidas. Miento si la había ... raro RARO (ver entrada anterior referente a los raros).
Siempre habían codigos, pues el cole era mixto, no se podía hablar sinverguenzamente en frente de cualquiera. Aparte el tema todavia era tabú en todo el Perú, no recibía el mismo trato que se le da ahora.

¿Nunca se te metió la idea de ser actor porno?, no se asusten, a mi tampoco, en realidad sería mucha la verguenza, aparte soy un timido como ya lo he contado. lo que si era práctica diaria, era envidiar a esos desagraciados que la emprendían contra una rubia quebradiza, una enfermera de ropas cortas, una profesora de colegio o una de cuerpo voluptuoso ( todas eran bonitas y sus cuerpos siempre lucían brillantes ).
Otra pregunta que me hacía frecuentemente era porque chicas tan lindas se prestaban para tremendos espectáculos explícitos. No lo comprendía, preguntaba dónde podía encontrar a esas chicas.

Soñaba en encontrarme en esas situaciones en algún momento de mi vida. Siempre lo soñe. Sueños que ahora se que muy difícilmente sucederán. Es verdad, lo que venden las pelas prohíbidas son mentiras, mentiras que muchas veces te hacen caer en el delirio, la exitación y el vicio.

Pero en fin, el porno es temporal, llegas a una edad donde simplemente te olvidas. Miento no te olvidas, pues siempre es bueno relajar la vista. Pero lo que si puedo asegurar es que a diario el vicio nocturno de satisfacer tus deseos más prohíbidos viendo los más excitantes videos desaparece. Cambias muchas veces a las peículas porno por otras que también han sido vistas anteriormente POR NOsotros.

1 comentario:

Javier dijo...

que chato mi texto "calenton" te inspiro xD.. jaja vale vale, em gusto lo que lei cague de risa, pero chato. POLICIA ESCOLAR?? n o seas pendejo.

psdta: hasta ahora no bajo al weko es distinto sin ti mmffff, mucha gente , muchas fursias, poca amistad.